El acompañamiento afectivo del padre y la madre es fundamental para un adecuado desarrollo intelectual y emocional del bebé en sus primeros 1000 días. La lectura compartida propicia el afianzamiento de los lazos afectivos con sus padres y nutre las necesidades intelectuales y emocionales del bebé. Por ello, hay que elegir cuidadosamente la lectura que vamos a compartir.
La revista Popi, expresamente creada para niños y niñas a partir de un año, atiende los diferentes aspectos que hay que acompañar y estimular.
Cómo ayuda la revista Popi al bebé en sus primeros 1000 días
Popi aporta conocimientos sobre el entorno
La revista Popi no solo ayuda al niño a conocer el entorno, sino que además refuerza los conocimientos que el bebé va adquiriendo:
- La casa (el baño, la cocina, el cuarto…) y otros entornos exteriores que forman parte de su vida cotidiana (el parque, la consulta del pediatra, el mercado, la calle…) aparecen reflejados de modo que el bebé pueda reconocerlos e interiorizar su función y las acciones y objetos propios de cada uno.
- Entornos más lejanos, como la selva o los polos, le presentan imágenes y formas de vida diferentes, de manera muy sencilla y accesible, y le «hablan» de la variedad y la grandeza del mundo en que vive.
Popi le acompaña en su día a día y fortalece su autonomía
Refleja la estación correspondiente con sus características (el otoño, el verano), las rutinas cotidianas asociadas a los diferentes momentos del día, los hábitos sanos de alimentación y de higiene, la ropita propia de cada situación…
Popi propicia el conocimiento de sí mismo y de los demás
- Los personajes fijos de la revista viven situaciones en las que se ve reflejado y con las que puede identificar. Y, con la ayuda del adulto, va poniendo nombre a sentimientos, emociones y sensaciones que está viviendo en esta etapa de su vida. Se va conociendo y va afianzando la seguridad en sí mismo.
- La revista presenta muchas situaciones sociales en las que los personajes interactúan: el cole, los juegos en el parque entre iguales, la consulta del pediatra… El bebé contempla distintos tipos de relaciones y de comportamientos, así como potenciales conflictos y la resolución de los mismos. Aprende valores, se acerca al punto de vista «del otro» y afronta de manera positiva la socialización.
Popi potencia el desarrollo del lenguaje en los primeros 1000 días del bebé
- Ofrece numerosas propuestas de intercambio que propician el aprendizaje (vocabulario y estructuras gramaticales sencillas) más allá del lenguaje utilitario del día a día.
- Estimula su deseo de hablar al poner ante sus ojos escenas en las que se le invita a participar señalando y contando en la medida de sus posibilidades lo que ve, siempre de la mano de papá o mamá.
- Ofrece repertorios de imágenes identificadas con su nombre, en torno a un tema común: los juguetes, las frutas, los animales del bosque, conceptos abstractos sobre la ubicación en el espacio (arriba/abajo, delante/detrás, etc.).
- Presenta textos cortos, adaptados a esta franja de edad y fáciles de entender con el apoyo de las ilustraciones, grandes, atractivas y reconocibles.
Popi le impulsa a interactuar con el adulto, con el que estrecha los vínculos afectivos
- Los momentos de encuentro propician el mutuo conocimiento, favorecen el equilibrio emocional y refuerzan los lazos de ternura y de complicidad. Son recuerdos de felicidad compartida que quedan en su memoria para siempre.
- Las actividades y los juegos animan al bebé a participar y a desarrollar habilidades para fortalecer su autoestima: lectura a dos voces en las que el bebé nombra un objeto representado en un dibujo, posturas de yoga para desarrollar la motricidad, juegos de comparar, señalar y situar elementos en un lugar concreto, que estimulan la psicomotricidad fina… Cada logro es un motivo de orgullo en el que muestra al adulto lo que ha aprendido y lo que sabe hacer.
Popi no solo alimenta su curiosidad y estimula su deseo de aprender, también le divierte, le hace reír y convierte la lectura en una actividad lúdica incorporada a los hábitos de vida cotidiana.
Consuelo Cuevas
Redactora jefa de la Revista Popi